Llevo unos días apartada de la blogesfera, la vida a veces te da un revés que tuerce todo lo que tenías previsto. Es lo que me sucedió la semana pasada, y me quedé de pronto sin rumbo.
La muerte es algo que siempre nos pilla desprevenidos, mucho más cuando se trata de alguien al que quieres. Me sorprende que la vida no se haya detenido ni un sólo segundo, todo continúa como si nada hubiera sucedido, pero yo necesito unos días para tratar de entenderlo todo y asimilarlo.
Volveré en unos días, pronto, cuando esté algo recompuesta y publicaré el post con la quiche, que era el que tenía preparado, para la propuesta salada de este mes para Whole kitchen y no pude publicarla el viernes. Volveré también a visitar vuestras cocinas y a recopilar miles de platos que guardo en pendientes para hacerlos y cometaros lo mucho que me gustaron.
No quiero olvidarme de que en estos días he alcanzado los 100 seguidores, MIL GRACIAS, a todos por vuestra fidelidad, a los que me visitáis y a los que me escribís. Gracias a todos.
Como se trata de un blog de cocina, os dejo esta foto de los olivos de Jaén, el mejor homenaje que le puedo hacer.
Hasta pronto.